martes, 5 de enero de 2010

Inicio de año

-¡Buenos días señor de enero! - dijeron los habitantes del mundo.
-¡Buenos días habitantes del mundo! - dijo el señor de enero quitándose el sombrero -¡Desháganse de las lagañas del rostro! ¡Y vuelvan a los viejos hábitos nocturnos! ¡Pues vengo a anunciarle al mundo que ha detenido su marcha que es momento de reanudarla!.
-¿Tan pronto hay que volver a la realidad? - preguntaron los habitantes del mundo, algunos mas entusiasmados que otros.
-No necesariamente, quienes lo deseen pueden ignorar mi llamado y quedarse viviendo en mi recién difunto hermano mayor, son libres de elegir lo que mejor les plazca sin embargo tan pronto haga sonar mi trompeta iniciara la carrera que quedo suspendida y no se esperara a nadie.

Dicho esto los habitantes del mundo se miraron unos a otros y lentamente de manera casi tímida se dividieron en dos grupos, uno mas numeroso que el otro. Cuando llego el momento el señor de enero se puso de nuevo el sombrero y soplo su trompeta; el ruido se pudo escuchar hasta las orillas mas apartadas de la tierra y toda criatura por mas grande o pequeña que fuera le escucho.

Los dos grupos separaron hermanos de hermanos, amigos que antes habían jurado el apoyarse infinitamente se alejaban o enemistaban. Algunos no soportaron el cambio brusco de su estado anterior a la realidad y la desesperación se aprovecho de ellos devorando sus almas.

El cambio siempre era difícil todos ya lo sabían, por eso el cambio solo ocurría una vez al año, por eso el cambio estaba rigurosamente regido por fechas, pero pocos o nadie se preparaban y por ello el señor de enero tiene la fama de cruel e inmisericorde "pero no soy ninguna de esas cosas" se recordaba de vez en cuando el Señor de enero, "Yo, extiendo mis brazos mientras ellos duermen y me preparo para recibirlos en cuanto despierten, a fin de cuentas, ellos son solo adolescentes con mal despertar" y el señor de enero sonríe.

1 comentario:

king dijo...

me gusto, ya que es muy cierto... enero hace una invitacion clara y fuerte, muy dificil de ignorar.Otra cosa que llamo mi atencion este escrito es que tiene tintes apocalipticos, saludos.

Florecillas azules.

Aquel verano lo pasamos conduciendo en su coche oyendo discos de Misfits. En aquel entonces yo no sabia quien era Glenn Danzig ni me importa...