sábado, 16 de abril de 2011

La delgada linea que separa ambas fronteras es un punto muerto que bien podría llamarse "tierra de nadie".

-Si te pido que me mates no es por el disgusto a la vida o por que me odie ni nada parecido, es sencillamente por el amor a ponerte en situaciones difíciles.
-Eres un hijo de puta ¿Sabes?
-Lo se.

Florecillas azules.

Aquel verano lo pasamos conduciendo en su coche oyendo discos de Misfits. En aquel entonces yo no sabia quien era Glenn Danzig ni me importa...