jueves, 9 de julio de 2020

Consulté mi horóscopo a principios del 2020 y el universo me dijo gritando que estimadamente mi destino le importaba 3 hectáreas de verga.

Viví buena parte de mi vida en la casa de mis padres.
Cuando la compraron eramos la primera familia que vivía ahí y con los años y conforme fueron naciendo mis hermanos la casa fue expandida y re-modelada, en un punto fue necesario romper el suelo de la sala y excavar por debajo de los cimientos porque un ruido que hacía el suelo al caminar sobre el daba la sensación de que la casa podría venirse abajo con el peso del nuevo piso que pensaban construir.
Pocos metros por debajo de los cimientos había un cenote que fue necesario tapar para que la casa no se viniera abajo.

En esta casa donde viven pasamos tres días encerrados comiendo galletas, atún y agua mientras el huracán Wilma nos pasaba por encima, e hicimos guardia en las noches junto a hogueras y vecinos armados con cualquier cosa que tuvieran a mano en las semanas que vinieron después de ello, el humo se hizo tan común y espeso que nos despertábamos con lagañas y los mocos ennegrecidos.
Experimenté en estas paredes algo que puedo catalogar como paranormal y que no logro explicar de manera racional ni lógica
Aquí les presenté a mis padres a mi primera novia, y dormí mas de una borrachera. Esta era la casa donde llegaba con mis amigos después de la escuela.
15 años viviendo aquí.

Y cuando dejé el nido esperaba no tener que volver, y ahora que ando en vísperas de hacerlo, de traer mi maleta, vender mis muebles y deshacerme de todas las cosas que acumule por mi cuenta, para re abastecerme, para sacar mis pendientes económicos, para planear el siguiente paso, para dejar de ahogarme despacio. Me siento perdido, me siento frustrado, enojado, desanimado, desganado y sobre todo, asustado, extrañamente, un poco patéticamente, curiosamente asustado, siento algo de miedo hacia esta casa, un miedo instintivo que me hace tener ciertas reservas.
Miedo a volver a sentirme un niño supongo.
No me gusta volver a esta casa.
Pero los planes se arruinaron totalmente, y todo lo que construí esta en peligro de perderse si no regreso de manera temporal.
Y viéndolo así no es decisión difícil. Solo se siente como si lo fuera.

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Florecillas azules.

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