Así que, después de poner el mensaje que la aguja nos había deletreado letra por letra frente al espejo para leer el mensaje invertido aquello decía:
Lo que quiero decir es que el mensaje o había mentido o no le importaba demasiado el estar en su posición, no sentía ni ira ni tristeza, ni arrepentimiento, quizás creyera que aquello le ayudaba a expiar culpas, o quizás lo disfrutase como un masoquista. Me vi tentado a preguntar si era masoquista pero la regla numero 37 prohíbe expresamente preguntas eso.
Hay una regla que prohíbe la venta de cosméticos.
Suena estúpido.
Pero romper las reglas se considera de mal gusto y luego hace que las cosas se pongan muy raras.