Apollo es la razón por la que no tengo uno de los dientes
previos a los molares, me lo hizo volar de un puñetazo mientras yo abría la
boca para intentar convencerlo de que el golpearme no valía la pena y que por
mi parte podía llevarse el auto si era eso lo que quería, desde luego, no
termine de esgrimir mis argumentos y lo único que logre con aquello fue perder
el patrimonio de la humanidad pegado a mis encías, sentí lastima por aquellas
futuras generaciones que no serian capaces de contemplar semejante maravilla.
Le tomo cuatro o cinco minutos a la cabeza de Apollo
convencerse de que la golpiza estaba injustificada, tal vez fue el hecho de
encontrarse en el estacionamiento de un Walt-mart y no en un terreno baldío a
oscuras, o el hecho de que su costal de boxeo no le regresaba los golpes (No
podía, tenia miedo de que si estiraba la mano para alcanzarle me golpearía mas
fuerte) o quizás simplemente decidió que ya estaba lo suficiente magullado pero
al cabo de esos cuatro o cinco minutos los golpes cesaron y me pregunto que
quien diablos era yo y que qué demonios
quería. Ahora, por favor pónganse en mi lugar amable lector: Hacia tan solo una
hora yo me había despertado húmedo por la lluvia que se colaba por la ventana
de mi habitación junto a una desconocida con olor a whiskey, había intentado
conseguir dinero para comprar agua y bajarme la sed y un desconocido que casi
se había desnucado con mi suelo estaba tan ahogado que me había arrojado las
llaves de un beetle en vez de las monedas que seguramente tenia en el otro
bolsillo, me había subido al beetle y había conducido los varios kilómetros
hasta el centro donde la cajuela había empezado a sonar, la había abierto en
plan de buen samaritano y me habían agradecido con una llave de cruz en el
pecho, una golpiza y ahora los niños lloraban en el vientre de sus madres
sabiendo que ya no podrían ver mi hermosa dentadura y el índice de suicidios se
dispararía al día siguiente cuando la noticia se hiciese publica, y aun así,
aquel tipo un tanto mas pequeño que yo ¡Me exigía a mi respuestas!
<¡COÑO RESPONDE!> Dijo mostrando sus puños, y aquello me recordó que después de todo yo era un caballero y como tal uno debe tener modales y hacer las presentaciones de rigor.
<¡COÑO RESPONDE!> Dijo mostrando sus puños, y aquello me recordó que después de todo yo era un caballero y como tal uno debe tener modales y hacer las presentaciones de rigor.
Apollo suspiro, pensó un poco, se rio un poco, se rio mucho
tiempo, se rio a carcajadas y cuando finalmente se calmo se presento como Víctor,
el apodo de Apollo se lo habían puesto por su parecido físico con el rival de
Rocky Balboa y su afición al boxeo, lo del parecido físico por mas que se lo
busque no lo encontré, aunque sobre lo del boxeo no me quedo duda. Treinta
minutos después estábamos compartiendo un six-pack de latas de cerveza sentados
junto al beetle, no hay nada mejor para forjar amistades que las peleas y el
alcohol, y bueno, nosotros teníamos ambos.
4 comentarios:
¡Queremos la quinta parte!
¡Queremos la quinta parte!
¬¬ Aun nada...
Ya me piqué xD síguele 1313
¿Y...?
Publicar un comentario